Captulo 2 Divorcimonos, Mateo. Qu tal este regalo de cumpleaos?El rostro atractivo de Mateo permaneci impasible.Me pides el divorcio solo porque no celebr tu cumpleaos?Luciana ha vuelto, no es as?Al escuchar ese nombre, una sonrisa fra se dibuj en los labios de Mateo, quien dej escapar una risa despectiva. Se acerc a ella con pasos deliberados.Te inquieta Luciana?Como el magnate ms joven del mundo empresarial, Mateo irradiaba un aura imponente, producto de su poder, posicin y riqueza. Su cercana hizo que Valentina retrocediera instintivamente.El fro de la pared contra su delicada espalda la sorprendi. En un instante, su visin se oscureci cuando Mateo la acorral, apoyando una mano contra el muro, atrapndola entre su fornido pecho y la pared.La mir con sus hermosos ojos entornados, sus labios curvados en una mueca sarcstica.Todo de Nueva Celestia sabe que Luciana era mi prometida. No lo sabas cuando te las ingeniaste para ocupar su lugar como seora Figueroa? Si no te import entonces, por qu ahora te haces la ofendida?El color abandon el rostro de Valentina.Era verdad. l estaba destinado a casarse con Luciana.Si no hubiera cado en estado vegetativo, cmo habra ella llegado a ser su esposa?Jams olvidara el da que despert: al abrir los ojos y verla, su mirada revel una decepcin y frialdad que ni siquiera intent disimular.Desde entonces, dorman en habitaciones separadas. Nunca la haba tocado.l amaba a Luciana.Todo esto lo saba, peroContempl profundamente el rostro de Mateo, superponindolo en su mente con aquel adolescente de aos atrs.Mateo, realmente no guardas ningn recuerdo de m?Pareca que solo ella segua anclada en aquellos das.Ya no importaba.Estos tres aos serviran como testimonio de su amor no correspondido.Reprimiendo el dolor y la amargura que le opriman el pecho, Valentina habl:w.m.Mateo, pongamos fin a este matrimonio sin intimidad.Las cejas de Mateo se arquearon, y su voz magntica pronunci:Sin intimidad?Levant la mano para sujetar su delicado mentn, su pulgar rozando sus labios carmes con intencin:As que es por eso que quieres el divorcio? Tienes deseos insatisfechos?El rostro delicado de Valentina se ti de un rojo intenso, como una fresa madura a punto de reventar.No era eso lo que quera decir!El pulgar de l presionaba sus labios rojos, mostrando una faceta seductora que jams habra esperado de un hombre tan distinguido y elegante.Era la primera vez que Mateo observaba a Valentina tan de cerca. Siempre vesta de blanco y negro, con esas enormes gafas oscuras que la hacan parecer mayor de lo que era...Pero ahora, notaba que su rostro era pequeo, del tamao de su palma, y sus facciones detrs de los lentes eran extraordinariamente hermosas, realzadas por unos ojos brillantes como los de un cervatillo, que la convertan en una belleza sin igual.Sus labios eran suaves.Donde su dedo presionaba, el color escarlata desapareca momentneamente para regresar al instante, tentadores y tersos.Daban ganas de probarlos.Los ojos de Mateo se oscurecieron.Vaya, no imaginaba que la seora Figueroa tuviera deseos tan intensos. Tanto anhelas a un hombre?PLAF!La bofetada de Valentina reson en la habitacin.El rostro de Mateo qued volteado por el impacto.Los dedos de Valentina temblaban de indignacin. Como siempre sucede cuando amas con demasiada humildad, tu sinceridad acaba siendo pisoteada. Cmo se atreva a humillarla as?S perfectamente que nunca has podido olvidar a Luciana! exclam, furiosa y herida. As que ahora los dejar estar juntos, devolvindole su lugar como seora Figueroa!El semblante de Mateo se congel instantneamente, cubierto por una mscara de hielo. Siendo quien era, nadie jams se haba atrevido a abofetearlo! Valentina pronunci con frialdad, te casaste conmigo cuando quisiste y ahora pretendes divorciarte cuando te place. Qu crees que soy?Un juguete respondi ella con una risa amarga.Qu?La furia se dibuj en el rostro de Mateo.Eres un juguete que le arrebat a Luciana minti Valentina, ocultando su dolor, y ahora que me aburr, quiero deshacerme de l.El rostro de Mateo se ensombreci tanto que pareca que iba a destilar veneno.Perfecto, Valentina, muy bien jugado. Si quieres el divorcio, lo tendrs. Pero no vengas despus llorando, suplicando que volvamos!Subi las escaleras hacia su estudio, cerrando la puerta con un estruendo que sacudi la casa entera.Las fuerzas abandonaron a Valentina, que se desliz lentamente por la pared hasta quedar acurrucada en la alfombra, abrazndose a s misma.Mateo, no volver a amarte.La maana siguiente, Regina, la sirvienta, entr al estudio.w..Mateo revisaba documentos en su escritorio, fiel a su reputacin de adicto al trabajo.Seor llam Regina suavemente.Ni siquiera levant la vista. Era evidente su mal humor; el ambiente estaba tan glido que podra congelar el aire.Regina coloc cuidadosamente una taza junto a su mano.Seor, es el caf que prepar la seora para usted.La mano de Mateo, que sostena la pluma, se detuvo un instante. Su expresin severa se suaviz ligeramente.Estaba ella buscando la reconciliacin?Deba admitir que Valentina haba sido una esposa ejemplar. Cocinaba segn sus gustos, lavaba su ropa a mano, atenda cada detalle de su vida cotidiana.Tom un sorbo de caf. Era tal como a l le gustaba. Pero segua enojado. La bofetada de anoche ese agravio no se borrara fcilmente. Una simple taza de caf no bastara.La seora reconoci su error? pregunt.Regina lo mir con expresin extraa.Seor la seora se ha ido.Mateo alz la vista, sorprendido.Regina extrajo un sobre.Se march con su maleta. Me pidi que le entregara esto.Al abrirlo, las palabras Acuerdo de divorcio saltaron ante sus ojos.Mateo qued atnito. Y l pensando que buscaba reconciliarse!La seora dijo que, despus de que termine su caf, firme los papeles del divorcio aadi Regina.Tralo! orden Mateo, mirando el caf con desprecio. Tralo todo!Regina pens: Hace un momento pareca disfrutarlo qu cambi?Se apresur a salir con la taza, sin atreverse a comentar nada.El rostro de Mateo se ensombreci mientras revisaba el documento. Ella no peda nada, se iba sin un centavo..o.mSolt una risa amarga. Qu orgullosa result ser. Cmo pensaba vivir una chica de pueblo sin dinero?Hace tres aos haba maquinado todo para casarse con l, no fue todo por dinero?Sus ojos se entrecerraron al leer la razn del divorcio.Escrito por Valentina: Debido a la incapacidad fsica del esposo, disfuncin sexual, imposibilidad de cumplir con los deberes conyugales.Su rostro se torn negro de furia.Maldita mujer!Tom su telfono y marc directamente el nmero de Valentina.La llamada se conect casi al instante.Hola? respondi ella con voz cristalina.
