---- Capitulo 7 Solo quedaba la mujer que habia jurado cobrar venganza por mi pasada muerte. Me encontré observando a un hombre frente a mi. Su presencia era magnética, con una figura imponente y rasgos definidos que demandaban atencién. Sus ojos desprendian un fuego salvaje, y su mirada intensa parecia capaz de escudrifiar hasta el ultimo secreto. No se parecia en nada al hombre que vivia en mis recuerdos. Nos observamos mutuamente en silencio, cada uno evaluando al otro. Sus ojos, de un azul profundo como el océano, me cautivaron desde el primer momento "Es un verdadero honor conocerla al fin, Princesa Selina. Su belleza supera con creces lo que me han contado', pronuncié con voz grave y seductora, dejando entrever cierta picardia. Le devolvi una sonrisa sutil. "Hijo del Rey Alfa, me pasé lo mismo con usted. Su gallardia y fuerza son atin mds impresionantes en persona". Su risa suave llend el espacio mientras nuestras miradas se cruzaban en un pacto silencioso. "La rosa negra que mandé hace poco', mencioné sefialando una maceta sobre la mesa, "ya florecié". Alcé mi mufieca con un movimiento deliberadamente sugerente, acercandome mas a él "Y yo luzco la joya que me envid, Su Alteza" Sus manos tomaron mi mano con delicadeza, observando el ---- brazalete antes de depositar un beso ardiente sobre mi piel. Alaric, el hermano mayor de Ryan, habia forjado una reputacién de hombre sabio y sereno entre las manadas Mi padre no se equivocaba, mi unién con Ryan entrelazaba el destino de las dos familias, y no era algo que pudiera deshacerse sin mas. Pero yo tenia clara una cosa: este compromiso debia terminar. Nada més renacer, hurgar en mis recuerdos me llevé hasta este hombree crucial que ahora tenia ante mi. Su sangre era de las mas puras, su posicién era privilegiada, y lo més significativo: la muerte lo reclamé demasiado pronto. En el fondo, Alaric era el auténtico heredero del reino. Todo lo que Ryan posefa deberia haber sido suyo por derecho. Incluso yo deberia haber sido su prometida. Pero el destino quiso que su madre partiera temprano. A pesar de su fortaleza fisica, el oréculo mas respetado del clan vaticiné que moriria de una enfermedad antes de cumplir los 26 afios Asi fue como el titulo de sucesor recayé naturalmente en Ryan, En mi vida anterior, Alaric apenas roz6 los 30 afios, sobreviviendo un poco més de lo predicho. La verdad era que, bajo su aparente tranquilidad, ardia una ambicién desmedida. Nunca form una familia, ni dejé descendencia. Sin embargo, al morir, su fortuna personal acumulaba més de la mitad de las riquezas del reino. Me estremecia pensar: si hubiera vivido mas tiempo, {qué tormenta ---- de sangre habria desatado en nuestro mundo? "Princesa Selina, noto que est tramando algo', la mirada de Alaric era como un taladro. Le sostuve la mirada, arqueando una ceja con desafio. "Principe Alaric, busco aliarme con alguien astuto. {Por qué no me demuestra primero su valia?" Esta vez, una sonrisa auténtica ilumin6 su rostro. Me examind detenidamente mientras apuraba su copa. Afios atras, la idea de que la princesa de la Manada Colmillo de Nieve se insinuara a un hombre habria sido un escandalo. Pero las circunstancias habian cambiado. Necesitaba un aliado ahora mismo. Y no uno cualquiera, necesitaba a alguien con verdadero poder.
