---- Capitulo 10 Eiden condujo a casa tan répido como pudo. Acababa de encontrar al mensajero en la puerta de su casa, pero no llevaba nada encima. -¢Donde esta mi entrega? -Eiden le agarré: -Creia que habias dicho que tenias un paquete de Cristina para mi. El mensajero se quedé desconcertado: -Sefior Frias... Su mujer ya ha firmado por usted, se lo di a ella. -{Mi mujer? -{Me equivoco? Pero esa sefiora acaba de decir que era la sefiora Frias... Eiden se apresuré a entrar en la villa. -iBlanca! gDénde estas? Blanca, que en ese momento se encontraba en el cuarto de bafio, se estremeci6. Tiré el contenido de su mano al retrete y pulsé frenéticamente el botén de la cisterna, pero al segundo siguiente, Eiden abrié la puerta del bafio de una patada Le arrebaté la caja de la mano y la hojeé con ansiedad. Eran fotos. Desde que era un adolescente a convertirse en un hombre maduro con los afios. En algunas llevaba uniforme escolar, de baloncesto, traje y bata. ---- De cara, de perfil, de espalda, habia de todos los angulos. Todas eran fotos suyas. Cristina fue quien le sacé tantas fotos. Algunas lo habia visto, otras no, todas sin que se enterara, Cristina los habia sacado a escondidas. Se notaba la evolucién de su talento, que al principio era de novata y al final, el empleo de la luz y la sombra y la composicién encajaba con perfeccién. Las habilidades fotograficas de Cristina basicamente maduraron sacéndole fotos. Las primeras fotos no eran tan melosas en su técnica, pero fueron tomadas con amor, y todo su ser parecia lleno de luz. Su amor, a través del objetivo, estaba tan lleno que estaba a punto de desbordarse. Mas tarde, bajo su camara, se convirtid en un hombre alto y maduro. A veces salia trabajando muy concentradamente, a veces comiendo con modales, en fin, todas eran fotos sobre de él Eiden pasaba las fotos como un loco, llorando y riendo mientras las miraba. A Cristina le gustaba. Estas fotos era su forma de decir que le gustaba Eiden, y que siempre le habia gustado. Al pasar a la ultima, Eiden se quedo paralizado. Esa era su foto de boda. Cristina lo capturé ---- Llevaba un esmoquin blanco y en el pliegue del brazo tenia la mano de otra mujer. De repente, su corazén se agité violenta y bruscamente. Se llev una mano al corazén y la foto casi se le escapaba de la mano. Aguantando el dolor, traté frenéticamente de agarrarla, pero entonces se sobresalt6 al ver que en realidad habia palabras en el reverso de la foto. iEra la letra de Cristina! Lo tom6 y lo identificd cuidadosamente. [Eiden, tal vez a partir de hoy deberia cambiar mi actitud hacie ti y tomarte como hermano de verdad. Hermano, te deseo lo mejor). Eiden sintié como si un gran agujero se hubiera abierto en su corazén y un viento frio silbara a través de él. Miré como un loco detras de cada foto. [Eiden, jestas tan guapo jugando al baloncesto!]. [Eiden, ya tengo dieciocho afios, soy una adulta, y quiero elegir a mi novio yo mi misma. Bueno, gsabes que me gustas?]. [Eiden, te hice una foto a escondidas otra vez. Realmente me asustas cuando te pones serio, pero nunca eres serio conmigo, casi que soy un poco especial para ti?]. [Eiden, estaremos juntos para siempre, gverdad? Cada vez estoy més insegura de esto, ,puedes darme una respuesta?]. [Eiden, realmente no escribi esa carta de confesi6n, pero verte tan