---- Capitulo 5 Busqué a tientas el cristal de comunicacion, con la intencion de apagarlo. Pero mis dedos, sudorosos y torpes, lo activaron por error. La voz de Angel irrumpié en la cabafia, desesperada y urgente: -iCamila! jDiosa Lunar! Donde estas? Lucas no... no te dejé en el Arroyo Madera Negra como prometi! -iEste juego de libertad previa al vinculo fue un error! jNo significé nada! Y Sofia... es una loba manipuladora, no vale ni un solo cabello tuyo. -(Dénde estas? {Voy por ti! Me arrepiento de cada palabra que dije en el claro, Esa maldita sugerencia fue una locura... Antes de que pudiera responder, Lucas me arrebaté el cristal. Su voz soné profunda, posesiva, cargada de triunfo. -{Arrepentimiento? Demasiado tarde. Ella no regresara a tu guarida. Esta en mi cama. Debajo de mi. -{Qué? jLucas Piedra Negra! CRAAC. Lucas trituré el cristal entre sus dedos. Los fragmentos cayeron junto a la cama. Luego bajé la cabeza, curvé los labios en una sonrisa oscura y mordié suavemente mi ldbulo, haciendo que mi cuerpo se estremeciera. -Otra vez. -Ordend. ---- La interrupcién de Angel... y la que pagé fui yo. Lucas me amé con una intensidad despiadada, como si intentara compensar siete afios de ausencia. No fue sino hasta que los primeros rayos del amanecer se colaron por las ventanas que, finalmente saciado, me atrajo contra su pecho y besé mi cabello -Eres mia, Camila. Nadie volverd a quitarte de mi lado Pero hoy... hoy era el dia de mi ceremonia del Voto Lunar con Angel. Deberia estar preparandome. Vistiéndome con la capa ceremonial de lobo blanco, colocando la insignia plateada de la Manada Sombra Lunar sobre mi pecho, esperando a que Angel viniera por mi Lucas lo sabia. Por supuesto que lo sabia. 'A medida que el sol subfa, su impulso salvaje fue cediendo, sustituido por una concentracién implacable. No pensaba dejarme ir. No se detuvo. Le supliqué una y otra vez, pero él solo repetia lo de la noche anterior, como si quisiera marcarme desde lo més profundo del alma. No me soltaba. Clavé su mirada en la mia, y con un grufiido insistente, repetia: ---- -No te aparees con él, Camila. Prométemelo. Prométemelo... -Camila, no lo elijas. Prométemelo. Yo queria prometerlo. Si tan solo me diera un respiro para hablar. Mi cuerpo era completamente suyo, pero él interprets mi silencio de forma equivocada. De pronto, colapsé sobre mi, pesado como una piedra, con los brazos envueltos alrededor de mi con desesperacion Su voz, ronca y suplicante, me acaricié el cuello: Camila... no te aparees con él... te lo ruego... Finalmente, aflojé lo suficiente como para que pudiera liberar una mano y tocar su rostro. -Estd bien. -Jadeé. Se incorporé de golpe, los ojos ardiendo, clavandolos en los mios. -{Lo prometes? Asenti, con las lagrimas agolpandose sin remedio. Sino hubiera prometido... gme habria dejado ir alguna vez? Y después de la noche pasada... después de esto... gpodia realmente regresar con Angel? Su nuez subi y bajé. Tras unos segundos de silencio, me miré con cuidado, con una pregunta sincera en los labios: =Si te lo pidiera ahora... que fueras mi Luna otra vez...Esta vez, de verdad... gLo harias, Camila? ---- Estaba exhausta, cada musculo de mi cuerpo rendido. Una risa incontrolable broté de mi garganta, y todo lo que pude hacer fue darle un leve pufietazo en el pecho. -Lucas Piedra Negra... has hecho conmigo lo que has querido toda la noche, sin dejarme ni respirar. Y ahora vienes a preguntarme si estoy dispuesta.. Una sonrisa se extendié por su rostro. Deslumbrante. Tal como aquella que me enamoré hace siete afios. -{Entonces eso es un si? De nuevo, todo lo que pude hacer fue asentir con fuerza, mientras las ldgrimas, de alegria y agotamiento, corrian por mis mejillas.
