---- Capítulo 10 Tres afios después. David Ilegó del trabajo, se sirvió un trago amargo y se sentó con la foto de Jazmín entre las manos. Enla imagen, ella sonreía radiante con un vestido blanco; él sentía que jamás había merecido su amor. Quizá sí lo tuvo, pero lo trató como algo obvio y nunca lo valoró. Desde que Jazmín se fue, su dolor crecía sin límites, hasta dejarlo sin aliento. -iDeja de vivir como si quisieras morirte! -le espetó Betty, recién llegada de la escuela- . éPor qué no la trataste mejor cuando mi mamá seguía viva? - Así le hablas a tu padre? jQué falta de disciplina! - Davidla reprendió. - Falta de disciplina? Fácil: haz que regrese mamá y verás cómo "mejoro". -Tú... -alcanzó a decir él; Betty ya había cerrado la puerta de golpe. David se desplomó en el sofá, desgarrado. ---- "Jazmín, écómo educabas tú a Betty? Vuelve, por favor; esta casa es imposible sin ti." Durante esos afios, los padres de Jazmín vagaron como sonámbulos. La culpa destrozó a su madre, que terminó ingiriendo un frasco de somníferos. El padre la halló y la Ilevó al hospital, pero fue demasiado tarde: falleció. Quiso enterrar juntas las cenizas de esposa e hija, pero Lilith le recordó que Jazmín había pedido que las Suyas se esparcieran en el mar: no quería volver a vera la família. Desde entonces, el hombre pasaba los días en la antigua habitación de Jazmín, mirando las fotos de ambas, sin vida en la mirada. El tiempo voló y 1Ilegó la ceremonia de graduación de preparatoria de Betty. David, con la cabeza gacha, hablaba por teléfono sin parar; Betty pensaba que, de estar su mamá, habría encontrado el salón, habriía preguntado por las carreras, la habría abrazado y celebrado que ya era adulta. ---- Pero no tenía mamá. "Ahora entiendo aquello de que un nifio sin madre vale menos que la hierba..." Terminada la ceremonia, David corrió al hotel para cerrar un trato: debía sostener todos los gastos sin Jazmín. Trabajar sin descanso era su único analgésico. Se le había encanecido buena parte del cabello y, salvo esa sefial, no sabía cómo lidiar con el vacío que dejó Jazmín. Llegó la carta de admisión de Betty: eligió la universidad más lejana. En la casa quedaría solo David, enfrentado al eco de las habitaciones vacías. En el cementerio. Lilith depositó flores frente a la lápida de Jazmín; sacó dos trozos de pastel de nuez, dejó uno y empezó a comer el otro. - Antes de separarnos nos encantaba venir al puesto de pastel de nuez frente a la escuela... y de pronto han pasado tantos afios. -Jazmín, quienes te hicieron dafio ya recibieron su ---- castigo. -POjalá que, en tu próxima vida, nazcas en una familia que te ame de verdad. -Tengo que irme; el trabajo me trae loca. La próxima vez te traigo tu vino blanco bien frío. Contempló en silencio la sonrisa grabada en la lápida y limpió con cuidado el polvo. Le dedicó una última sonrisa y se dio la vuelta. Una brisa suave pasó; un pajarillo se posó sobre la tumba, sacudió las alas... y se 1Ilevó la nuez del pastel.