---- Capítulo 9 El concurso duró una semana desde la eliminatoria hasta la final.Durante esa semana, me reuní con algunos viejos amigos y me enteré de lo que había sucedido después de mi partida. -lsabel realmente se buscó su destino. Pero quien más sufre es ese nifo. En todos estos afios, Francisco nunca lo ha visitado. Sus padres lo Ilevaron a verlo, pero é! ni se interesa. Dicen que el mes pasado estuvo gravemente enfermo... A mitad de la frase, mi amiga se dio cuenta de su indiscreción y se detuvo abruptamente. Sonreí ligeramente, sin darle importancia. Estos asuntos ya no tenían nada que ver conmigo, Sin embargo, durante toda esa semana, Francisco apareció puntualmente cada mafiana con el desayuno y cada noche con un refrigerio, lo que me resultaba bastante molesto. Los otros equipos ya comenzaban a murmurar. Me di cuenta de que esto no podía continuar así. La noche antes de la final, lo busqué para hablar con él Su sonrisa se congeló y desvió la mirada con resistencia -Podemos no hablar de esto? Laura, te conozco demasiado bien. Cuando me hablas con ese tono, significa que no tengo ninguna oportunidad. No quiero hablar. Abrí la boca, pero no pude contradecirlo. Finalmente, sentí un dolor en mi corazón. Diez afios era mucho tiempo; nos conociamos demasiado bien. É! volteó a mirarme, su voz tenía un tono suplicante: -Laura, ---- después de diez aíios juntos, z de verdad soy imperdonable? Viste la grabación, yo también fui víctima de un engaio. Los ojos de Francisco estaban Ilenos de reproche, su rostro reflejaba dolor. Por un momento, me pareció ver al joven que conocí hace afios. En realidad, éramos demasiado jóvenes entonces, sin la madurez para manejar los problemas adecuadamente. Deberíamos habernos sentado a hablar, quizás así ambos hubiéramos podido seguir adelante. En estos aios, rara vez pensaba en el pasado. Después del nacimiento de mi hija, sentí que la vida estaba Ilena de belleza, Pasar cada día con un grupo de nios simplificó mis pensamientos. Pero hoy, para lograr que Francisco se alejara de mi vida, tenía que revivir el pasado. Lo miré y hablé lentamente: -Francisco, tú mismo instalaste las cámaras de seguridad en nuestra casa. Después de lo que pasó con Isabel esa noche, ;por qué nunca se te ocurrió revisar las grabaciones? El rostro de Francisco cambió bruscamente, como si lo hubiera acorralado con esa pregunta. Después de un largo momento, respondió: -Yo... estaba demasiado asustado, no pensé en Sonreí levemente. -No pensaste, o simplemente no quisiste revisar? En el fondo, estabas apostando. La situación ya habia ocurrido, tus padres te presionaban, y los Gutiérrez necesitaban un heredero. ; Y si Isabel realmente quedaba embarazada? El problema se resolveria. -Así que aceptaste que Isabel no tomara anticonceptivos, y cuando quedó embarazada, a propósito elegiste el hospital donde trabajaba ---- la amiga de tu madre, porque sabías que si te veía en el departamento de obstetricia, seguramente le contaria a tu madre, £ verdad? Francisco abrió la boca, pero al final no dijo nada. Volteé la cabeza y continué: -Incluso antes de eso, fui de viaje porque tú me lo sugeriste. Y esa noche, grealmente tuvo un accidente la novia de tu asistente? Las lágrimas finalmente corrieron por mi rostro mientras lo miraba con una sonrisa más dolorosa que el llanto: -;Ves? Te dije que te conozco mejor que tú mismo, Esta era la verdadera razón por la que decidí irme. Era demasiado calculador. Nos manipuló a todos, incluso a sí mismo. Francisco palideció, como si estuviera a punto de desmayarse. Nunca imaginó que Laura lo habia descifrado por completo. Después de un largo silencio, finalmente logró articular: -Yo... solo no queria divorciarme de ti No dije nada más, pero me sentí decepcionada una vez más. Quizás su intención inicial era resolver el problema del heredero, pero la traición seguia siendo traición. Además, ;realmente no sintió nada por ella? Cuando encontró a Isabel interesante, cuando la consideró especial, ya habia empezado a sentir algo. Simplemente no se atrevia a admitirlo. -Francisco, la traición es traición. Deberías saber que nunca perdonaré una traición, sin importar el motivo. -Me gusta mi vida actual, espero que no vuelvas a molestarme. Al irme, no pude evitar afadir: ---- -Cuida bien a ese nifio. La vida sin el amor de un padre o una madre, yo la viví cuando era pequeãa, y no quiero que otro nifio pase por lo mismo. Después de decir esto, me fui sin mirar atrás, Detrás de mí, Francisco parecía estar Ilorando, con un Ilanto tan desamparado como el de un nifio. Pero ya no volvería a mirarlo. En aquel concurso, ganamos el primer premio. De regreso, mi hija se acercó a mi oído y preguntó en voz baja: - Mamá, zese senor no vendrá más? Queria despedirme de él. Me sorprendí y le pregunté tentativamente: -El sefor está muy ocupado. ; Te agradaba mucho? Ella asintió: -Parecía muy amable y nos compraba muchas cosas ricas. Luego sonrió picaramente: -Pero Liliana quiere más a mamá y a la directora mamá. Sonreí y le pellizqué suavemente la nariz: -Entonces volvamos rápido con la directora mamá. -iSííi! -gritaron al unísono todos los nifios. Su grito asustó a algunos pájaros posados en los árboles. Batieron sus alas y volaron hacia el cielo azul.