---- Capítulo 6 La madre de Valen, la Anciana Elena, salió lentamente, aferrándose a ese maldito contrato de pergamino. Su voz sonaba más fria y distante de lo que é] jamás había escuchado. - iVienes a buscar a Valen para esa ridícula ceremonia de unión? fO quizás a preguntar por qué Valen no le entregó simplemente el título de Luna a tu "pura e inocente" Sofía? Carlos captó el fuerte sarcasmo en sus palabras y se le tensó la garganta. - ;Dónde está ella? - Preguntó con voz ronca-. jáDónde demonios está Valen?! - FEso, alfa Carlos, es una pregunta que ya no tienes derecho a hacerme. De hecho, tengo una pregunta para ti, ifuturo alfa de Bosque Negro! La Anciana Elena se burló. De repente, levantó la mano y lanzó el contrato de pergamino sobre la mesa de piedra frente a Carlos. - FEI "rescate" que esa escoria de Sombra Nocturna exigió fueron dos conjuntos de hierbas y suministros raros, jeso sería suficiente para que escaparan a salvo! j Di todo lo que tenía por la seguridad de mi hija Valen! Y Diego y tú, jprometieron frente a todos los ancianos que proporcionarían la otra mitad desde Bosque Negro! ---- Entonces dime, jépor qué esos suministros solo alcanzaron para esa tal Sofía, que vino de la nada?! -iDos "rescates"! jPodrían haber asegurado que tanto mi hija Valen como esa Sofía estuvieran a salvo! jáóPor qué Valen fue simplemente abandonada por ti, dejada para casi morir en esas llamas?! La lista de suministros y el tiempo de entrega en el contrato quemaban los ojos de Carlos. Cuarenta minutos antes de que estallara el incendio, el alfa de Sombra Nocturna le había dicho a través de un mensaje mental, que solo había recibido sus suministros, así que solo liberaría a una de ellas. Y Valen... cuando finalmente sacó su cuerpo casi carbonizado del fuego, jel valle Ilevaba ardiendo casi dos horas! jápenas respiraba! Los dedos de Carlos recorrieron la marca de garra garabateada del alfa de Sombra Nocturna al final del contrato, y un escalofrio profundo se extendió desde sus pies. De repente, recordó algo ocurrido hace dos meses, cuando Sofía Mendoza llegó por primera vez a Bosque Negro. Diego le había susurrado. -Carlos, los ojos de esta ---- pequefia son demasiado agudos. No parece una omega normal, sino más bien una víbora, esperando para atacar. éQué había respondido é] entonces? - PUna loba solitaria que ha perdido a su manada está destinada a estar nerviosa y a la defensiva, no te preocupes por eso. Aunque dijo eso, Diego y él le habían advertido a Sofía más de una vez que mantuviera un perfil bajo. Pensándolo ahora, recordó a Sombra Nocturna, ese nombre, ese tótem... jáóno fue esa la manada malvada que todas las demás manadas se habían unido para destruir hace cinco afios por traición?! Y Sofía Mendoza afirmaba ser la única sobreviviente de esa tribu masacrada. -Está en el Refugio del Bosque. La Anciana Elena vio la mirada complicada en el rostro de Carlos, que no parecía fingida, y logró reprimir parte de su ira. -Mi hija me lo dijo antes de irse. No quiere la posición de Luna de Bosque Negro. jNi ahora, ni nunca! En cuanto a ti, Carlos, y ese Diego, y cualquier "vínculo del destino" que pensaste que tenías con ella... jusó un arte secreto de los Deluna y lo cortó ella misma! -éY este lugar? jTe agradecería alfa Carlos, y a tu buen ---- amigo Diego, que nunca vuelvan a poner un pie aquí! jEl clan Deluna puede ser pequefio, pero nuestros guardias no son solo para exhibición! Con esa advertencia, la Anciana Elena se dio la vuelta y regresó a las profundidades de la cueva, claramente quería que se fuera. Carlos se quedó allí, aturdido, durante mucho tiempo. No fue hasta que la pesada campana en la cima de la montafia sonó cinco veces, que se dio cuenta de que su armadura de cuero estaba empapada en sudor frío. Conla mano temblorosa, logró conectarse mentalmente con Diego Herrera. Al instante, escuchó un alboroto de risas y la risa asquerosamente dulce de Sofía. - Diego, eres tan fuerte... esta pierna de venado está deliciosa, dame otro bocado. Ese tono empalagoso, mezclado con el crepitar de la hoguera y los aullidos sugestivos de lobos jóvenes, eran como ufias arafiando una pizarra. La mente de Carlos retrocedió al tercer día después del incendio, en el que Sofía, acostada débilmente en una cama de piedra, lo miraba lastimosamente. - Alfa Carlos, el vestido de Luna de Valen debe ser tan ---- hermoso, si tan solo pudiera usarlo... Yenese entonces en su mufieca, éno tenía el brazalete de protección de luz estelar que él le había puesto personalmente a Valen en el festival de la Diosa de la Luna del afio pasado? -iVEN AQUÍ AHORA MISMO! - El rugido de Carlos golpeó la mente de Diego. -iTienes media hora! jvVEN AHORA! jPONTE FRENTE A MÍ! Antes de cortar la conexión, vagamente escuchó a Diego maldecir. - Aguafiestas. Seguido por el gemido aún más delicado de Sofía. No sabía lo que estaba sintiendo. élra? é Arrepentimiento? ;O un miedo que le 1Ilegaba hasta los huesos? La emboscada, Valen, Sofía, Sombra Nocturna. Simplemente sentía que algo enorme, algo vital, había sido completamente pasado por alto por él, jqué idiota! Él y el igualmente estúpido Diego Herrera, estaban a punto de pagar un precio que no podían permitirse. Al salir de las cuevas Deluna, no regresó a la tienda ---- principal. En cambio, corrió como un loco hacia el lugar prohibido de Bosque Negro: la cueva donde se guardaban las reliquias de adivinación. Lanzó ese contrato de pergamino, y una gota de la sangre de su corazón, imbuida con su poder de alfa, sobre la piedra de adivinación. iTenía que saber la verdad sobre Sombra Nocturna! j Sobre Sofía Mendoza! jáQué clase de estupidez había cometido?! El tiempo pasaba con una lentitud asfixiante y Carlos caminaba de un lado a otro, agitado. Una verdad aterradora estaba emergiendo lentamente en su mente. iPero no podía creerlo! iSe negaba a creerlo absolutamente! El enlace mental de Valen seguía muerto, sin respuesta. Era como si el tiempo se hubiera congelado en el momento exacto en que ella se había marchado. Dos horas después, el único vidente de Bosque Negro, viejo y ciego, el único que podía leer la piedra de adivinación, entró arrastrando los pies en la cueva, ---- apoyándose en alguien. Tembloroso, colocó un fragmento de piedra recién inscrito frente a Carlos. -Gran alfa, esto es lo que deseabas saber -la voz del viejo vidente apenas era un susurro- . El alfa de esa manada Sombra Nocturna, efectivamente tenía una hija. Fue criada como un arma desde la infancia, siendo hábil en el disfraz y la seducción, para ser enviada a otras manadas fuertes como espía. -PCuando su hija alcanzó la mayoría de edad, el alfa de Sombra Nocturna planeó usarla para obtener beneficios, incluso la hizo fingir ser la omega más insignificante. Hay alguna información oculta sobre ella aquí alfa, por favor, échale un vistazo. Carlos agarró el frío fragmento de piedra, sintiendo como si tuviera la garganta Ilena de plomo. Se obligó a dar vuelta a la piedra. Junto al extrafio tótem de Sombra Nocturna, un nombre estaba claramente grabado, un nombre que lo sumergió en un abismo helado: jSofía Mendoza! -iéCómo puede ser ella?! jóCómo es posible que sea ella?!
