---- Capítulo 7 Enuninstante, todas las pistas que había ignorado deliberadamente, encajaron. El arrepentimiento por haber empujado a su pareja destinada al abismo personalmente, casi consumió el corazón de Carlos. Estaba a punto de agarrar al viejo vidente por el cuello, de rugir y exigir saber si esa adivinación era cierta, cuando el enlace mental de Diego Herrera irrumpió en su mente. "iCarlos! jáDónde demonios estás?! jNos Ilamas a todos ala tienda principal para verte, y luego desapareces! jiA qué mierda estás jugando?!" Carlos cerró los ojos con desesperación, el espeso sabor a sangre subió por su garganta y su voz fue débil. "Valen, ése ha puesto en contacto contigo?" Diego sonó como si hubiera escuchado el chiste más ridículo del mundo, su burla hizo que las sienes de Carlos palpitaran. "jéDe qué diablos estás hablando?! jCarlos! jTodo el mundo en Bosque Negro sabe que esa perra de Valen te ha estado siguiendo como un cachorro desde que ---- éramos nifios! jSi está ignorando tu enlace, el enlace del futuro alfa, épor qué demonios me contactaría a mí?!" "Además, jesos rumores sobre que ella planeó la emboscada aún no han desaparecido! jEn este momento, probablemente quiera arrancarme el corazón y comérselo!" Carlos permaneció en silencio durante la diatriba de Diego. Diego finalmente sintió que algo andaba mal. "jéQué diablos te pasa?! jáCarlos?! jáDesde cuándo te importa tanto esa perra de Valen?! No me digas... no me digas que realmente... jáhas desarrollado sentimientos por ella?! já Has olvidado la advertencia de la Diosa de la Luna sobre nuestro linaje?!"' "jéCómo pudiste hacerle esto a Sofía?! jiOlvidaste la promesa que le hiciste a Sofía junto al fuego?! jIncluso si marco a Sofía en el futuro, tienes que darle la mitad del honor que le corresponde a la Luna! jáEstás tratando de echarte atrás...?!" El resto de las palabras de Diego fueron ahogadas por el sabor metálico que brotaba en la garganta de Carlos. No había dormido en toda la noche y sus agudos ojos de lobo estaban inyectados en sangre. ---- Querfa decir que él, Carlos del Bosque Negro, efectivamente había tenido sentimientos por Valen. Esa atracción profunda en su alma, ese anhelo de un alfa por su Luna destinada, había sido real. Pero desde que apareció esa maldita Sofía... no podía excusarse a sí mismo de sus estúpidas acciones. Todas las palabras se le atascaron en la garganta. Al final, solo escapó un susurro. "Espérame, Diego. Tengo algo que decirte... algo que podría poner a Bosque Negro patas arriba". Cinco y media de la tarde. Diego pateó la pesada puerta de piedra de la tienda principal del alfa. Carlos miraba un cristal mágico, perdido. En él se mostraba claramente el asombroso registro de consumo de Sofía en Bosque Negro durante los últimos seis meses: hierba rara de rayos lunares, recursos de adivinación, gemas élficas. El aprobador estaba claramente listado como "alfa Carlos" o "Diego". -iéEstás loco?! jCarlos! Diego sacudió su cabello mojado, con el cefio fruncido. - iéMe arrastraste aquí con prisa solo para mirar esta mierda insignificante?! jiSofía todavía está esperando ---- que patrullemos el territorio con ella! -FEI alfa de Manada Sombra Nocturna, Víctor, ese carnicero, ese demonio... es su padre. Carlos golpeó el contrato de pergamino que detallaba el " rescate" y el fragmento de piedra que revelaba la verdad. -"Tres meses antes de esa emboscada, Víctor logró escapar de unas ruinas antiguas. Y tú, Diego, con todos esos privilegios que le has dado a Sofía últimamente... fue suficiente para que contactara en secreto conlos restos de Sombra Nocturna bajo nuestras narices. Y, usando nuestros recursos de la manada, alquiló ese almacén lleno de trampas en el borde de nuestro territorio. Luego, encendió ese fuego que lo quemó todo, con sus propias manos. -REse viejo bastardo de Víctor estaba empefiado en usar a su hija para destruir Bosque Negro. El resto... no necesito explicártelo, ya deberías saberlo todo. La expresión en el rostro de Diego se congeló. La dulce risa de Sofía parecía resonar en sus oídos cuando recordó los últimos dos meses. Cada vez que la ' pobre e indefensa" Sofía Mendoza era "acosada" por la " arrogante" Valen, Carlos y é| siempre aparecían "justo a tiempo". ---- Como aquella vez que Valen solo seguíalas reglas del clan, cuestionando públicamente a Sofía en la sala del consejo de ancianos por usar hierbas curativas destinadas a los cachorros, sin permiso. Sofía inmediatamente cayó de rodillas y comenzó a abofetearse. Cuando Carlos y é| entraron corriendo, todo lo que vieron fue a Valen luciendo "agresiva" y la cara de Sofía lNlena de lágrimas. En cuanto a la espalda de Sofía, no había ni la más mínima marca de látigo. -iNo! jEso es imposible! -iéSofia Mendoza?! jéY ese bastardo asesino de Víctor?! iCarlos! jáQué clase de broma enferma me estás gastando?! -iSolo estás inventando esto para que acepte a Valen de vuelta! iVerdad? jEstás intentando ensuciar a Sofía?! -iCarlos! jReacciona! jántes odiabas la arrogancia de Valen más que nadie! La voz de Diego temblaba, pero se calló por completo cuando Carlos mostró una grabación de vigilancia encriptada. La imagen mostraba que eran las cuatro de la mafiana del día de la emboscada. Sofía, con un vestido largo ---- blanco, salía por la puerta lateral del almacén abandonado, pero no había ni un rastro de pánico en su rostro. Y Valen, a quien se suponía que debían proteger con sus vidas, estaba a punto de ser devorada por las llamas. Cuando rescataron a Valen, apenas quedaba una pulgada de piel sin quemar, pero Sofía... ni siquiera el dobladillo de su vestido estaba sucio. Completamente diferente de cómo se veían las dos cuando las trajeron a Bosque Negro. Todas las pruebas apuntaban a una respuesta escalofriante: jSofía conocía a esos malditos secuestradores de Sombra Nocturna! Yeran cercanos. La Sofía desalifiada y maltratada que habían visto esos últimos días era solo una actuación que había montado para ellos. Y todo lo que había tramado no era solo por ganarse la simpatía de los dos candidatos a alfa. Probablemente, era por todo Bosque Negro. El cuerpo de Diego tembló violentamente, y casi se derrumbó. Esos últimos días, para vengarse de Valen por "lo que hizo a Sofía", había sido implacable en su venganza. ---- Esos viciosos rumores de la manada sobre que Valen planeó la emboscada, traicionando a la manada, los había difundido é! mismo. Pero ahora, la verdad le golpeó duramente en la cara. j Había odiado a la persona equivocada! iSe había vengado de la persona equivocada! La única inocente en todo eso era Valen. Una ola de impotencia casi lo asfixió y no supo cómo salió de la tienda principal del alfa. Cuando Carlos levantó la mirada de nuevo, la tienda estaba vacia. Los afios de entendimiento tácito entre los dos candidatos a alfa de Bosque Negro hicieron que, casi instintivamente, eligieran no hacer nada, por el momento. Hasta el día anterior a la ceremonia de unión, la que se retrasó debido al "accidente" de Valen. Carlos se quedó solo en el taller donde se hacían las túnicas ceremoniales de la manada.
