---- Capítulo 6 Marcos fue derribado al suelo, su cuerpo golpeando la tierra con un sonido sordo. Permaneció largo rato allí, arrastrándose, con su costoso traje desgarrado y manchado de barro y sangre. Sus manos arafiaban la hierba, dejando surcos en la tierra como un animal herido. Luego levantó lentamente la cabeza, su rostro cubierto de lágrimas, mocos y tierra. -Nicolás... eres mi Beta más confiable, mi mejor hermano... -su voz era ronca y quebrada, casi irreconocible-, pero no entiendes, Se limpió la nariz con la mano, dejando una raya de sangre en la mejilla -Ella tuvo un hijo antes, así que pensé... no era justo... Las palabras salieron en un susurro ahogado, como si decirlas en voz alta las hiciera reales. Las pupilas de Nicolás se dilataron de golpe, y su cuerpo entero se tensó. -Sofía tuvo un hijo? Su voz se rompió en la última sílaba, mientras su rostro oscilaba entre el espanto y la incredulidad. -iCuándo? zCómo? jEso es imposible! Marcos asintió dolorosamente, con la cabeza caída como un muãeco roto. ---- -Celeste incluso presentó una prueba de paternidad, que son documentos oficiales del centro médico de la Manada de Plata. Sus hombros temblaban con cada palabra. -Su hijo... en realidad era su hermano menor en casa... Me dijo que Sofía me habia estado mintiendo por aõos. Que habia dado a luz a los dieciséis y dejó que sus padres criaran al nifio como su hijo. Nicolás apretó los puíos al instante con fuerza. Se acercó y le dio otra patada en el hombro, esta vez más fuerte. -iEstás diciendo puras tonterías! Su rugido resonó por todo el cementerio, alterando a los cuervos en los árboles cercanos. -iTodos sabíamos cómo era Sofía! -iNo mentiría ni aunque le fuera la vida en ello! 'Se ponía roja cuando intentaba sorprenderte en tu cumpleaíios! -iMaldita sea, zen serio le creíste a esa perra mentirosa en lugar de a tu propia mate?! Marcos seguía tirado en el suelo, los mocos y las lágrimas deslizándose sin control por su rostro. Respiraba entrecortadamente, como un animal herido. -Yo... estaba tan confundido... Nicolás... -El tiempo coincidía. Se fue por dos aõos cuando tenía dieciséis, dijo que estudiaba en el extranjero... -Esa prueba de paternidad era real... sellos oficiales, todo. ---- -Su hermano en realidad era su hijo... Nicolás se agachó frente a él, con el rostro torcido por el asco y la rabia. Lo observó en silencio por un largo rato, viendo cómo su Alfa se habia convertido en un ser Ilorón. -Das lástima -dijo con calma-. Destruiste lo mejor de tu vida porque no pudiste manejar la posibilidad de que tu Luna perfecta tuviera un pasado. -Aunque fuera cierto, que no lo es, z qué importa? iTenía dieciséis afios! jEra una nifa! -Se levantó abruptamente, quitándose la tierra de las rodillas- Pero no pudiste ver más allá de tus propios celos y orgullo. Luego abandonó a Marcos allí y se alejó de mi tumba, con los pasos pesados y definitivos. Los gritos de Marcos lo siguieron por todo el cementerio, pero Nicolás no miró atrás. Solo después de conducir más de diez kilómetros, hizo una Ilamada. Sus manos seguían temblando de rabia mientras pulsaba el contacto. -Sofia.. Su voz sonaba ronca. -Ah, bueno, por fin terminó todo. -eCuál es tu próximo plan? zA dónde planeas ir? Me senté en el borde del acantilado, observando el paisaje frente a ---- mí, escuchando el sonido de la cascada cercana. El aire fresco de la montafia Ilenó mis pulmones, borrando los últimos rastros del olor del territorio de la manada. Toda la belleza de la naturaleza me trajo una paz que no sentía desde hacía meses. -Estoy pensando en los Territorios del Norte -dije, con la voz firme -. Alli hay manadas más pequeias que no les hacen caso a los refugiados. Ese día, cuando Marcos trajo a Celeste a nuestra casa, si no hubiera perdido a mi loba, realmente la habria destrozado. La rabia que sentí al verla arrodillada, haciendo de víctima, fue algo que nunca antes habia experimentado. Pero nunca pensé en morir. La muerte habria sido demasiado fácil, demasiado definitiva. Marcos no valía la pena para sacrificar mi vida. En cuanto a Celeste, sabía que el Consejo no la dejaría ir una vez que descubrieran que habia estado manipulando pruebas. Solo pedí a mis amigos de confianza que recogieran todas mis cosas, preparándome para mudarme a otra manada, Todo lo que realmente me importaba cabia en tres maletas. Era increíble lo poco que en verdad era mo después de cinco afios siendo su Luna Mientras empacaba, me encontré con Nicolás. Habia estado intentando contactar a Marcos por un asunto urgente del Consejo, pero Marcos estaba demasiado ocupado cuidando a ---- Celeste para responder. AAsí que Nicolás Ilevó el documento urgente a la casa. Al ver que realmente me preparaba para irme, no intentó detenerme ni hacer preguntas. Simplemente salió, compró dos botellas de vodka y se sentó a escuchar. -eQuieres hablar? Su propuesta fue sencilla, sin juícios ni condiciones. Desde que estuve con mi Alfa, habia ido perdiendo contacto con mis viejos amigos. Todo mi mundo giraba a su alrededor, a ser la Luna perfecta. Habia olvidado cómo existir como yo misma, 'Aunque Nicolás creció en la misma manada que Marcos, sabía que tenía su propio código moral. Nunca aprobó el trato de Marcos hacia los miembros de la manada, ni participó en la crueldad casual que acompaíiaba al poder absoluto. Sabía que podía confiar en él Realmente necesitaba a alguien con quien hablar, así que me abri completamente con él -En realidad, sé todo. Escuché todas tus conversaciones en el centro de sanación. El vodka ardía al pasar por mi garganta, pero me soltó la lengua. -Nicolás, he perdido a mi loba. Ahora solo puedo ser una Omega, é ---- verdad? Nicolás quedó atónito, con su vaso detenido a medio camino de sus labios. No esperaba que supiera tan pronto, que hubiera escuchado sus discusiones privadas. -Sofía, lo siento mucho. Pensamos que estabas inconsciente.. Después de eso solo bebió en silencio, escuchando mi relato derrotado de todo lo que había sufrido. Cuando le dije que realmente planeaba dejar esta manada para siempre, se levantó con una determinación repentina, -Sofía, déjame manejar esto por ti. -gQué quieres decir? -Si simplemente desapareces, Marcos te perseguirá. Su orgullo no te dejará ir. Pero si estás muerta... Usando su estatus de Beta y sus conexiones, encontró un cadáver quemado de complexión simílar a la mía en la morgue de una manada cercana, una errante que habia muerto en un accidente de coche el día anterior, cuya familia era demasiado pobre para costear un funeral adecuado. Pagó a la familia de la difunta con piedras preciosas de alta calidad para pedirles prestado el cuerpo, diciêndoles que era para investigaciones del Consejo. Desde la planificación inicial hasta que me quité la pulsera y se la entregué, todo el proceso tomó menos de una hora. -Nicolás, cuesta creer que no lo tuvieras todo planeado desde antes, zeh? ---- Sonreí mientras le entregaba la reliquia famíliar, el último lazo con mi antigua vida. Él sonrió, pero sus ojos seguían vacios, -Sofía, cuando estés establecida, Ilámame. Iré a visitarte, a ver si necesitas algo.