---- Capítulo 8 A finales de mes, se celebró la fiesta de compromiso entre Diego y Olga, tal como estaba planeado. Esa noche, el salón se 1lenó de figuras importantes de Ríoalto: empresarios, políticos, celebridades. Todo el mundo quería estar ahí. Olga, enfundada en un vestido exclusivo de alta costura, se movía entre los invitados como si flotara. Sonriente, segura, disfrutando cada mirada. Cerca de Diego, sus amigos se reunían a su alrededor, levantando copas y palmeándole la espalda. -iFelicidades, hermano! Ya era hora de que tú y Olga terminaran juntos. - Desde que eran nifios se notaba que eran el uno para el otro. Si no fuera por Elsa metiéndose donde no debía, nada se habría complicado. - Hablando de eso... falguien sabe qué fue de Elsa? - Después del secuestro, dicen que se fue del país. Y con todo el dinero que soltó Diego, seguro ahora está viviendo como reina en algún rincón del] mundo. Para mí, fuiste demasiado generoso con ella, Diego. ---- Al escuchar ese nombre, Diego frunció el cefio casi sin darse cuenta. Desde aquel día, Elsa no había vuelto a aparecer. Se decía que se fue por vergiienza, por todo el escándalo del video. É] tambiénlo creyó en su momento. Pero lo que no esperaba era su completa desaparición. Llevaba más de dos semanas sin dejar rastro. Sin una publicación. Sin una historia. Ni una foto. Como si la tierra se la hubiera tragado. Uno de sus amigos notó su silencio. -Ey... no me digas que de verdad te Ilegó a importar Elsa. Diego reaccionó de golpe. Su expresión se endureció. -iDespués de todo lo que le hizo a Olga? Lo único que siento por ella es asco. No digas estupideces. - "Ya, ya. No dijimos nada... Justo en ese momento, Olga se le acercó con tono dulce y una sonrisa de nifia consentida. Se colgó de su brazo y susurró: - FEl esposo de Carolina le regaló un collar de zafiros precioso... Yo también quiero uno. ---- Diego ni se lo pensó: -No tienes mi tarjeta black? Si te gusta, cómpralo. No tienes que pedirme permiso para esas cosas. Los amigos soltaron carcajadas y aplausos entre bromas: -iEso sí es amor del bueno! - oOlga, de verdad... icómo hiciste para amansar a un tipo como Diego? jcomparte la fórmula! Ella sonrió como reina coronada, sintiéndose en la cima del mundo. Enlas últimas semanas, Diego había sido generoso hasta el exceso: viajes, cenas en los mejores restaurantes, joyas, detalles... Todo lo que antes le negó, ahora se lo daba sin pensarlo, como queriendo compensar el tiempo perdido. Y Olgalo recibía todo encantada. Cada regalo la acercaba más a su gran meta: ser oficialmente "la esposa de Diego." - No hay fórmula -dijo ella, cubriéndose la boca con unarisita falsa- . Solo le entregué mi corazón... y él, el suyo. Pero en su mirada no había ternura. Había conquista. ---- La ceremonia de compromiso comenzó sin contratiempos. Justo antes del intercambio de anillos, el maestro de ceremonias tomó el micrófono con entusiasmo: -Como muchos saben, la sefiorita Olga y el sefior Diego se conocen desde hace afios. Por eso, preparamos un pequefio video con recuerdos de esa época. jLos invito a mirar la pantalla! Todos los invitados giraron con curiosidad. Pero lo que apareció en pantalla fue como una bomba cayendo en medio del salón. -Elsa, me contaron que te acostaste con Diego... jy hasta hay un video! iDe verdad creías que con trucos tan baratos ibas a quedártelo? -ÉI no te quiere. Nunca te quiso. Es más... jte odia! La voz de Olga, empapada de veneno, retumbó por toda lasala. El video no mostraba recuerdos de la universidad. Era claramente una grabación reciente, tomada durante la fiesta anterior. Se veía a Elsa y Olga discutiendo en una sala privada. Olga alzaba la mano, amenazante, pero al ---- notar que la puerta se abría, se metía un trozo de pastel a la boca y se dejaba caer al suelo, Ilorando como víctima. Durante todo ese tiempo, Elsa no la había tocado ni una sola vez. La actuación fue tan meticulosa que a muchos se les helóla sangre. Incluso Diego se quedó paralizado. Él había creído todo: que Olga era la víctima, que Elsa le había dado nueces a propósito. Pero en ese instante, todo se derrumbó. La "alergia" no era más que una mentira. El drama había sido un montaje, una trampa perfectamente planeada. Antes de que Diego pudiera reaccionar, el video cambió. Ahora enla pantalla aparecía una mujer con el rostro difuminado, tendida en el suelo. Varios hombres la sujetaban con fuerza mientras le vertían chile líquido en la boca. Ella gritaba, suplicaba, pero ellos no se detenían. Se reían, le arrancaban la ropa, le tomaban fotos como si fuera un espectáculo. Diego sintió que el aire le faltaba. No necesitó ver el ---- rostro entero. Lo supo de inmediato: era Elsa.