---- Capítulo 7 Realmente no sabía nada de esto. Pensándolo bien, tenía sentido. Carlos vivía solo en una gran casa a su corta edad y hasta tenía un apartamento desde la universidad. Claramente venía de una familia acomodada. Pero nunca se me ocurrió que fuera el hijo del director de la empresa. Justo cuando lo mencionamos, Carlos me Ilamó a su oficina. Volví en mí y recordé que tenia algo importante que informarle. La empresa de la família de Carlos se especializa en transacciones de antiguedades y tesoros de alta gama. Él habia iniciado una nueva división de arte moderno. Aunque las obras y joyas de esta línea no generaban transacciones millonarias como la línea premium, habia abierto un nuevo mercado y les iba muy bien. Curiosamente, varias pinturas de Lucía estaban a la venta allí, y no eran baratas - todas rondaban los cien mil. Y justo habíamos descubierto un problema con ellas. Sus pinturas eran plagios que combinaban obras de varios artistas menores. No se habia detectado en evaluaciones previas, pero yo lo descubrí usando análisis de datos. -Director Morales, creo que si otros profesionales descubren esto, dafaria seriamente la reputación de la empresa. Debemos retirarlas de inmediato -le dije. Carlos lo tomó muy en serio y Ilamó al equipo técnico para una nueva evaluación detallada. -Si lo que dices es cierto, no bastará con retirarlas. Haremos que la artista pague una indemnización por incumplimiento de contrato. j Este engaíio viola el acuerdo! ---- Asentí, el seguimiento ya no era asunto mío. Terminado el tema laboral, Carlos volvió a sonreír: -Ya te dije que me llames por mi nombre. No sé por qué, pero me incomoda que me digas "director". -Estamos en la oficina, no puedo ser tan informal -bromeé-. zO prefieres que te Ilame "joven amo"? Carlos se sorprendió al darse cuenta de que ya sabía su identidad. Algo avergonzado, se rascó la nariz y dijo que no había sido su intención ocultármelo. Principalmente temía que, de saberlo, yo evitara trabajar en la empresa Mereí: -No tengo ese tipo de orgullo tonto. ; Qué puede ser más importante que ganar dinero? Con mi primer sueldo y comisiones podría pagarle el alquiler. Pero nunca imaginé que días después, Lucia irrumpiría en la oficina armando un escándalo. Probablemente entró usando su estatus de artista colaboradora. Me encontró y se acercó furiosa. Antes de hablar, ya estaba Ilorando. -Katia, ,por qué me atacas así? Intencionalmente difamaste mi obra para que la retiraran. jEstás abusando de tu poder! Mi rostro se endureció al instante. -Deja tu patético acto de víctima. Conmigo no funciona. Por supuesto, sabía que no actuaba para mí, sino para ganar la ---- simpatía de los demás. Como ahora: aunque mis colegas desconocían la situación, al verla tan afligida, no pudieron evitar acercarse a consolarla. Yo no fui tan amable. -La evaluación de plagio la realizaron otros departamentos especializados. No tengo tanto poder como para hacer lo que quiera enla empresa. Lucia, nada convencida, alegó que los elementos clásicos en la pintura son limitados y que cualquier simiílitud sería referencia a grandes maestros anteriores. -Lo mio es un homenaje. Tú no estudias arte, ;cómo podrías entenderlo? jSé que fuiste tú quien me acusó de plagio! Seguro la empresa solo quiere evitar problemas y por eso te sigue el juego para acosarme. Mientras hablaba, Lucía Iloraba desconsoladamente, con la mano sobre su vientre ya algo abultado. -gAsí es como una gran empresa abusa de una artista sin conexiones? Las redes sociales son muy poderosas ahora. Si no se disculpan, me compensan y vuelven a exhibir mis obras, gritaré mi injusticia en internet. iDejaré que todos vean cómo maltratan a una madre soltera embarazada! Al oír esto, las expresiones de los presentes cambiaron. Lucía me miró con ojos triunfantes, escondiendo su satisfacción. En ese momento, alguien la agarró fuertemente del brazo. Diego, que de alguna manera había entrado, la regafó furioso: -gQué haces en la empresa de Katia? ;Viniste a causarle problemas?