Shane Hayes y yo habíamos estado casados durante casi dos años, durante los cuales, él nunca había mostrado mucho deseo se%ual.
Y desde que supe que estaba embarazada a principios de este año, no me había tocado diciendo que tenía miedo de lastimar al bebé. Incluso se había mudado a su estudio y dormía en la pequeña cama que tenía.
Sólo tenía veintiséis años, estaba casada y embarazada, pero tenía que dormir sola todas las noches. Me sentía sola y miserable.