Capítulo 45: Roy levantó la vista y sus ojos se iluminaron momentáneamente con un agradecimiento tácito hacia Sadie, antes de ocultarlo rápidamente con una expresión neutra. Después de todo, Sadie no era una desconocida; había sido una presencia constante, aunque sutil, al lado de Noah durante los últimos dos años, con una elegancia y discreción dignas de una pieza de decoración de alta calidad. Con una sonrisa indiferente, Roy respondió: «Ah, señorita Hudson, qué agradable sorpresa. ¿Le acompaña hoy el señor Wall?». Sus ojos recorrieron el lugar, fingiendo un interés casual por el entorno, pero buscando en secreto a Noah. Manteniendo su apariencia serena, Sadie estaba preparada para responder. Le entregó la propuesta comercial, un documento que había perfeccionado incansablemente. Su voz era firme, con un equilibrio perfecto entre respeto y firmeza. —Señor Domínguez, estoy aquí para presentarle esta propuesta comercial en nombre del señor Wall. Él valora mucho nuestra colaboración anterior. Me ha comentado que le preocupan algunos detalles del departamento de planificación, por lo que me ha pedido que se lo entregara personalmente para asegurarse de que lo recibiera», explicó con la mirada fija. Roy echó un vistazo rápido al plan de negocio, con expresión impenetrable, y lo dejó a un lado sin abrirlo. Su sonrisa era tenue, casi forzada, cuando respondió: «Señorita Hudson, he venido aquí hoy para relajarme, no para enredarme en conversaciones de negocios». Levantó la mirada, aguda y evaluadora, mientras rechazaba sutilmente sus esfuerzos. «Y por favor, dígale al Sr. Wall que es mejor dejar el pasado en el pasado. No tiene sentido insistir en ello». El corazón de Sadie dio un vuelco, pero no estaba dispuesta a dar marcha atrás. Respiró hondo para calmar sus nervios y se lanzó de forma proactiva a la dinámica actual de Maple Group. Domínguez, nuestra asociación para este trimestre está llegando a su fin y Maple Group está explorando activamente alianzas que se ajusten mejor a su visión —afirmó, manteniendo una actitud serena y profesional. Sin embargo, sus ojos brillaban con un atisbo de desesperación—. Dada la sólida infraestructura de Wall Group, es ideal para reforzar las ambiciosas estrategias de expansión de Maple Group. Hizo una pausa para causar efecto, con tono sincero. Domínguez, le insto a que considere nuestra propuesta. Estoy segura de que podría cambiar su perspectiva». Sadie sabía que ese momento era crucial, no solo para ella, sino también para Wall Group. La línea entre el éxito y el fracaso era peligrosamente delgada. Sadie articuló sus pensamientos con tal precisión y convicción que Roy, que antes se mostraba desdeñoso, ahora parecía notablemente sorprendido. Sus delgados dedos tamborileaban con un ritmo constante sobre la mesa, y cada golpe resonaba al unísono con los latidos del corazón de Sadie. Roy finalmente abrió la propuesta comercial y la hojeó rápidamente. Aunque en general coincidía con sus expectativas, era mucho más detallada y presentaba numerosas recomendaciones interesantes que sin duda beneficiarían a Maple Group. A medida que pasaba las páginas, fruncía cada vez más el ceño, lo que delataba su creciente escepticismo. La propuesta demostraba un profundo conocimiento de las operaciones de Maple Group y preveía con astucia posibles asociaciones, un nivel de perspicacia que no se esperaba de una secretaria normal. —Bueno, sobre esta propuesta… —comenzó Roy, vacilante, mientras cerraba el documento. Sus agudos ojos se clavaron en los de Sadie—. ¿La has redactado tú sola? Aunque aparentaba estar tranquila, Sadie sentía que el corazón le latía con fuerza en el pecho. Apretó los delicados dedos con tanta fuerza que una fina capa de sudor le humedeció las palmas. En un principio, había elaborado esta propuesta para aliviar la carga de Noah. Con la valiosa información que había recopilado de él sobre Maple Group, había logrado elaborar un plan detallado y estratégico. Sin embargo, nunca se había atrevido a presentárselo a Noah, por miedo a que considerara su iniciativa como una presunción.
