---- Capitulo 9 La culpa y el arrepentimiento batallaban en el corazon de Marcus como lobos en lucha, su poder Alfa fluctuando peligrosamente con cada oleada de emocién. Tras un largo instante, su voz emergié fria como el invierno, cada palabra con el peso de una orden Alfa "Sarah es mi Unica pareja', grufié, dejando caer los colmillos. "Mi lobo la eligié, aunque yo fui demasiado ciego para verlo". "Viva o muera, ella es la Unica que reclamaré. Los lazos de la manada no mienten; nunca aceptaron a Rachel" Sus garras emergieron mientras continuaba: "No me importa si Rachel esta emparejada o soltera. Ahora ella no significa nada para mi. Todas sus mentiras, todas sus manipulaciones, valen menos que el polvo". = "Esa noche de hace tres afios fue un error', escupié las palabras como veneno. "Si hubiera sabido que Oliver saldria de esto, nunca la habria tocado. Nunca habria comenzado esta cadena de destruccién Su poder crepitaba visiblemente ahora, haciendo parpadear las velas ceremoniales. "Esta ceremonia era lo que querias; puedes encargarte de las consecuencias. He terminado con tus planes". "Mi pareja estd alld afuera'. Su voz se elevé hasta convertirse en un rugido. "iY la encontraré aunque me cueste la vida! {Mi territorio, mi posicién, todo... lo sacrificaré todo!". Se giré para irse; su poder Alfa era tan fuerte que hacia que los lobos menores gimieran y se desnudaran la garganta. ---- Antes de que pudiera llegar a la puerta, Rachel se abalanzé sobre él, su perfecta fachada resquebrajandose de miedo genuino. Ella acunaba a Oliver en sus brazos, con panico en los ojos mientras le bloqueaba el paso. *\Marcus!', grité desesperada, agarrando a su hijo. "/Oliver arde de fiebre! ;Su lobo esté luchando contra algo! jNecesita un curandero! ¢ Adénde vas? jPor favor, ayuda a nuestro hijo primero!" La cara del cachorro estaba roja, su pequefio cuerpo temblaba con un calor antinatural. Incluso a esa distancia, Marcus podia oler la enfermedad. En ese momento, su teléfono soné con un tono distintivo: su Beta lo llamaba. Ni siquiera miré a Rachel ni a su hijo sufriente. Su voz era gélida: " Llévalo td mismo a un curandero. Mis padres se encargaran de su cuidado de ahora en adelante. Has logrado manipularlos bastante bien', Luego salid del salén ceremonial, dejando atras los gemidos de su hijo. En cuanto salid, aceptd la llamada con dedos temblorosos. "¢Alguna noticia? ¢Has encontrado a Sarah?". Su voz se quebré por la desesperacion. El profundo suspiro de su Beta se escuché con claridad. "Alfa, he buscado por todas partes. Solo sabemos que ella pasé dos noches en un hotel antes de irse y luego tomé ese coche hacia la frontera. No hay nada més: ni rastro de olor, ni testigos, nada. Deberias hablar con los equipos de ---- busqueda. Después de tanto tiempo, podrian haber encontrado sus restos...", Marcus colgé antes de terminar, con el teléfono crujiendo en su mano. Se negaba a creerlo. Su lobo aullaba en negacién Se negaba a aceptar que Sarah lo abandoné voluntariamente, después de todo lo que ella habia soportado. Se negaba a creer que ella habia muerto en ese ataque descontrolado, que su cuerpo habia sido abandonado a la caza de carrofieros. El subié a su coche de un salto, con el motor rugiendo al arrancar. Corrié hacia la base del equipo de busqueda, forzando el motor al limite, tomando curvas a velocidades peligrosas. Pero después de dos intersecciones Frené de golpe junto a la carretera, con los neumaticos chirriando en protesta. Se golped la cara dos veces con angustia, tan fuerte que le hizo sangrar. La verdad ya no podia negarse. El mismo habia provocado el incendio, habia elegido el momento preciso. Habia ordenado la inyeccién de plata con su propia voz, habia visto cémo envenenaban a su loba. Ahora Sarah estaba débil, su loba, una vez poderosa, moria en su interior.