---- Capítulo 12 Mi hermano utilizó toda su fuerza de Alfa, hundiendo sus dedos en la garganta de Selena con una potencia que habría matado instantáneamente a un humano. Un grufiido bajo y primitivo retumbó desde lo más profundo de su pecho: el sonido de un depredador listo para eliminar una amenaza a su manada. Al principio, Selena luchó ferozmente, extendiendo sus propias garras mientras trazaba líneas sangrientas en los antebrazos de él, sus ojos destellaron dorados por el pánico. -Estás... lastimando... al bebé -logró decir, entre jadeos desesperados por aire. Pero mi hermano estaba más allá de escuchar. Sus ojos ardían carmesí, sus venas se oscurecían alrededor mientras su lobo se acercaba a la superficie. Pronto, los forcejeos de Selena se debilitaron, las lágrimas corrían por su rostro enrojecido y sus labios se tornaron azules. -Suéltame... jestás equivocado! -tosió y jadeó, con una voz apenas audible intentó decir -. Nunca pretendí... -iHe visto las pruebas y sigues mintiendo! -rugió él, haciendo temblar el equipo médico a su alrededor - . j Devuélveme a mi hermana! éQué le hiciste? /QUÉ LE ---- HICISTE? Con cada pregunta, la estrellaba contra la pared, haciendo que el yeso se agrietara y se desmoronara a su alrededor. El lobo en él estaba tomando el control por completo, el pensamiento racional cedía ante la rabia protectora en estado puro. -iAuxilio! jQue alguien me ayude! -los gritos de Selena se volvieron más desesperados al darse cuenta de que podría matarla-. jSe ha vuelto salvaje! jAYUDA! Mi hermano había perdido completamente el control. Sus colmillos estaban extendidos ahora, su rostro parcialmente transformado, algo que ningún Alfa debía permitir que sucediera en público. Los gritos de pánico de Selena resonaron por el pasillo del hospital, atrayendo la atención del personal y los pacientes. Si el Dr. Winters, el sanador principal de la manada, no hubiera pasado por allí e intervenido con una jeringa llena de extracto de acónito, mi hermano podría haber desgarrado la garganta de Selena allí mismo, en el estéril pasillo del hospital. -IiAlfa Esteban! jcontrólese! -gritó el Dr. Winters, hundiendo la aguja en el hombro de mi hermano. Dos guardias de seguridad, ambos Betas, lo agarraron ---- por los brazos, tirando de él hacia atrás mientras el sedante comenzaba a hacer efecto. Selena se desplomó en el suelo, agarrándose la garganta magullada, jadeando por aire. Mientras se recuperaba, algo cambió en sus ojos: la máscara de inocencia que había llevado durante tanto tiempo se agrietó por completo, revelando el frío cálculo debajo. -iEstás loco! jHas perdido completamente la cabeza! - grufió, con voz ronca, pero ganando fuerza. Apartó a la enfermera que intentaba examinarla- . (Cómo te atreves a culparme por lo que le pasó a tu preciosa hermana? Se tambaleó hasta ponerse de pie, manteniendo a los guardias de seguridad entre mi hermano y ella. - éNo fuiste tú quien decidió que ella me había lastimado sin una pizca de evidencia? jTú la enviaste a ese centro de rehabilitación sin siquiera dejarla hablar! - su voz se elevó con cada acusación-. Y después, éino fuiste TÚ quien le dijo que se muriera? jTe escuché hablando por teléfono! Se frotó el pecho, todavía recuperando el aliento, sus ojos nunca abandonaron el rostro de mi hermano. - éQué derecho tienes de culparme por algo? jSi ella ---- muere, tú eres quien la mató! jSu sangre está en TUS manos, no en las mías! Ahora que mi hermano lo sabía todo, Selena no veía razón para continuar su farsa. La dulce y vulnerable chica que había pretendido ser, se desvaneció en un instante. Dejó caer toda pretensión y mostró sus verdaderas intenciones: calculadora, viciosa, completamente interesada en sí misma. Mi hermano temblaba bajo el agarre de los guardias de seguridad, el acónito hizo sus movimientos lentos, pero no era solo la droga lo que lo afectaba, las palabras de Selenalo habían apufialado directamente en el corazón porque contenían el peor tipo de veneno: la verdad. -iCállate! -gritó él, con la voz quebrada- . jCÁLLATE! Intentó abalanzarse sobre ella nuevamente, luchando contra los guardias con la fuerza que le quedaba, pero ellos se mantuvieron firmes. Selena retrocedió con cautela, una sonrisa cruel jugaba en las comisuras de sus labios. -La verdad duele, éno es así, Alfa? -se burló-. Destruiste a tu hermana por tu cuenta, yo solo te ayudé a ver lo que querías ver. En ese preciso momento, sonidos alarmantes estallaron ---- desde mi habitación del hospital: el agudo y continuo pitido de un monitor cardíaco sin pulso. -iCódigo Azul! jHabitación 307! -gritó una enfermera, pasando junto a ellos. -iEmergencia! jLa paciente no tiene pulso! -llamó otra, empujando un carro de reanimación. El rostro de mi hermano perdió todo color. Dejó de luchar contra los guardias instantáneamente, sus ojos se ensancharon con horror. -íéCielo? -susurró, luego habló más fuerte- . jCIELO! Con un impulso de fuerza desesperada, se liberó y corrió hacia mi habitación, el acónito quedó olvidado conla oleada de adrenalina. La habitación era un caos: enfermeras posicionando equipos, un doctor preparando las paletas del desfibrilador, el sonido continuo de la línea plana perforando el aire. -iDespejen! El doctor presionó las paletas contra mi pecho. Mi cuerpo se arqueó con la descarga, luego quedó inmóvil. El monitor continuó su tono ininterrumpido. ---- -Fcielo, jno hagas esto! jCielo, por favor, no puedes morir! -suplicó mi hermano, empujando al personal para agarrar mi mano inerte desesperadamente. Sus garras se habían retraído ahora, sus dedos eran gentiles a pesar de su temblor - . No así, no por mi culpa. Una enfermera intentó moverlo. - Alfa, necesita dejarnos... -iTodo es mi culpa! -gritó él, ignorándola completamente, presionando su frente contra mi mano - . iMe equivoqué! jNo soy humano! jSoy peor que el monstruo que te acusé ser! jMerezco morir! jTe he fallado, les he fallado a nuestros padres, he fallado en todo lo que un hermano debería ser! Sus lágrimas caían calientes sobre mi piel mientras suplicaba. -Cielo, si tan solo despiertas, jharé cualquier cosa! Te daré todo lo que tengo, incluso desapareceré de tu vida si eso es lo que quieres. jSolo por favor, por favor, vive! El doctor preparó las paletas nuevamente. -Cargando a 300. jDespejen! Mi hermano retrocedió a regafiadientes, todo su cuerpo temblaba. -FCielo, por favor -susurró, su voz quebrándose con ---- emoción cruda- . No me dejes. Eres todo lo que me queda en este mundo. jDespierta! -su voz se elevó en un aullido de desesperación-. jYo debería ser el que muera! jTú deberías vivir!
