---- Capítulo 5 - FEl hospital me exigía el pago y no pude localizarte... -iQué? -dijo mi hermano frunciendo el cefio, pero antes de que pudiera terminar, Selena se acercó a nosotros. --cCielo, entra -dijo ella con calidez - . áTe sientes mejor? Necesitas dinero para la cuenta del hospital, é verdad? Te haré la transferencia. - 2Yo me encargo -interrumpió mi hermano, enviándome diez mil dólares de inmediato- .(Es suficiente? - preguntó secamente. Asentí y me di la vuelta para irme, con la intención de recuperar mi collar. -iAdónde vas? -exigió saber. - FEl collar de cristal sanador que me dejó mamá... tuve que dejarlo en la clínica como garantía. Apenas había dado unos pasos cuando Selena me agarró del brazo. - Parece que va a Ilover -dijo con falsa preocupación - . Acabas de salir del hospital. No andes por ahí, deja que el chofer lo busque por ti. ---- Quería negarme, pero mi hermano me observaba fijamente. Sabía que si rechazaba la sugerencia de Selena, se enfadaría. Sin embargo, el chofer regresó mucho después sin mi collar. El sanador afirmó que había desaparecido. -éCómo puede haberse perdido? ;Cómo? jSolo fue un día! iDije que volvería con el dinero! jSe lo prometí! - dije, con la voz quebrada por la desesperación. -Bueno -el sanador se encogió de hombros-, la clínica recibe a mucha gente todos los días. No podemos estar pendientes de todo. Mira, si eso ayuda, te perdonaremos los gastos médicos. Agarré el brazo del sanador, suplicando y exigiendo respuestas. -iBasta! jDeja de humillarte! -Mi hermano me apartó de un tirón-. jEra el collar de mamá y lo entregaste descuidadamente a unos extrafios! Ahora ha desaparecido, áde quién es la culpa? Se disculpó con el sanador y me arrastró fuera. -Haré que alguien lo busque -murmuró--. Deja de montar escenas. Gritando en un lugar público... équé te pasa? Sus duras palabras me dejaron sin habla. ---- Me encerré en el sótano, incapaz de dormir durante toda la noche. No podía entender por qué perder el collar me lNlenaba de tanto terror y pánico, quizás porque era una de las pocas cosas en mi vida que aún me pertenecían. Ni siquiera había podido conservar eso. Esa noche, sofié con mi madre. Tocó mi rostro, sonriendo con tanta ternura, conlos ojos lIlenos de preocupación. - Mi amor, épor qué estás tan delgada? Tu hermano no te ha estado cuidando? Conteniendo las lágrimas, me lancé a sus brazos y Iloré. -éQuién ha estado molestando a mi hija? Les daré una lección. éEs tu hermano? - No, mamá. Mi hermano es bueno conmigo -dije, sin poder contener las lágrimas - . Mamá, te extrafio tanto. Estoy tan cansada y perdí el collar que me diste. Soy una inútil. Me encerré en mi habitación durante todo un día, sin querer ver a nadie. Mi hermano nunca vino a verme, pero Selena sí lo hizo. Cuando la vi, intenté cerrar la puerta, pero ella ladeó la cabeza para mostrar mi collar de cristal sanador perdido colgando de su cuello. ---- -éCómo lo conseguiste? - jadeé. Aprovechando mi conmoción, se abrió paso hacia mi habitación a la fuerza.