---- Capitulo 16 Crisis en el hospital Punto de vista de Olivia Con las manos temblorosas, agarré las llaves del auto y sali cortiendo. Diego, que claramente también habia escuchado la llamada, me alcanz6 y me sujeté la mano -Tienes que calmarte, Olivia -me dijo con firmeza-. Déjame conducir. Por una vez, no discuti. Cada segundo era crucial. Atravesamos las calles mojadas bajo la lluvia, en completo silencio. No fue hasta que el hospital ya casi estaba a la vista que rompi el silencio. {Qué pasé? -pregunté, con el corazén encogido-. {Cémo fue que consumié productos lécteos? Diego nego con la cabeza -No lo sé. Raquel estaba cuidandolo mientras yo fui a verte. Un frio presentimiento me recorrié de pies a cabeza. -{Raquel? ¢La misma que trajo un pastel de crema a su cumpleafios, sabiendo de su alergia? Diego no me respondié, pero su silencio lo decia todo. Llegamos al hospital casi derrapando en el estacionamiento. Saltamos del auto antes de que este terminara de detenerse y cortimos hacia la entrada. Sara nos esperaba en el vestibulo, con su rostro palido por la preocupacién. Cuando me vio, corrié hacia mi. ---- -Est en la Sala de Tratamientos 3 -me dijo mientras me guiaba apresurada-. El Dr. Molina esta con él, pero estan teniendo dificultades para estabilizarlo. -{ Qué tan grave es? -le pregunté, temiendo la respuesta Su expresién lo dijo todo. -Muy grave, Olivia. Casi llegé aqui con las vias respiratorias completamente obstruidas. 'Avanzamos por el pasillo a toda prisa. A un lado, en una banca, estaba Raquel, con la cabeza entre las manos. Al escuchar nuestros pasos, levantd la mirada. Tenia el maquillaje corrido por las lagrimas. Olivia! -solloz6, levantandose de golpe-. {Qué bueno que llegaste! jPasé algo terrible! Diego se adelanté con el rostro desfigurado por la rabia. -{Qué hiciste? -le espeto. Antes de que Raquel pudiera responderle, Sara me tomé del brazo. -Oscar sigue en urgencias. Su condicién es critica y necesitan tu ayuda. Nadie conoce su historial médico como tu. No necesitaba escuchar més. Aparté a Diego y a Raquel de mi camino y me lancé hacia la Sala de Tratamientos 3. El Dr. Molina levanto la vista apenas irrumpi en la sala. Pude ver el alivio en sus ojos. -Dra. Valdés, menos mal que ha llegado -exclamé-. Su respuesta inmunoldgica es algo que jamas habia visto. Los tratamientos habituales no estén funcionando. ---- Corti al lado de Oscar. Mi corazén se rompié al verlo. Su pequefio cuerpo hinchada, casi no podia respirar, incluso con un respirador artificial. Las maquinas pitaban de manera alarmante a su alrededor. -{Cual es su estado? -pregunté, entrando en modo profesional. -Presién 80/40, frecuencia cardiaca 160, saturacién de oxigeno en 85% con soporte -me informé una enfermera-. Le hemos administrado tres dosis de epinefrina, pero la respuesta ha sido minima. Entendi de inmediato por qué los tratamientos habituales no funcionaban. Oscar necesitaba un tratamiento especial. -Necesito 20 mg de corticosteroides modificados para licdntropos y el extracto de hierbas europeas que guardo en la oficina -le ordené-. Era el frasco verde del gabinete con Ilave. Su sistema necesita tanto medicina tradicional como tratamiento de la manada. Mientras el equipo corria para seguir mis instrucciones, escuché gritos fuera de la sala. Diego y Raquel discutian a voz en cuello en el pasillo. {Qué pasé? jDime qué le diste! -le gritaba Diego -iNada! -chillé Raquel. ;Solo comimos helado después de cenar! j Antes lo habia comido sin problemas! Sali al pasillo, sintiendo cémo la furia hervia en mi interior. -{Helado? -le repeti, mirandola como si no pudiera creerlo-. ¢Le diste lacteos sabiendo su alergia grave? Raquel me mird con esos ojos grandes y suplicantes. -Antes habia comido pequefias cantidades y no pasé nada... Pensé